jueves, 10 de octubre de 2013

Los carpinteros uruguayos y el COU de Luján


por Fernando Momo

Corren tiempos curiosos para la argumentación política.
Los periodistas y analistas que apoyan al actual gobierno nacional y su “modelo” pasan de una defensa pragmática del modelo extractivista, llámese Vaca Muerta o La Lumbrera o la soja transgénica, basados en que “la Argentina necesita energía” (o minerales, o materia prima) a un repentino ecologismo militante porque “la pastera contamina el río y arruina el agua, un recurso estratégico”.

Por su parte, los medios opositores (y en muchos casos golpistas), fluctúan entre una crítica, a veces profunda y bien fundada, al extractivismo del modelo (véase por ejemplo la reciente nota de La Nación “Recursos naturales: el costo invisible del modelo” por Steven Levitsky el 6 de octubre) y una descalificación de los argumentos argentinos en el tema de la pastera, señalando que en Argentina hay muchas pasteras y son peores que la ex Botnia y que Uruguay viene plantando árboles hace 30 años “como política de estado”.